Día Mundial del Braille: ¿cómo se adapta este alfabeto a las tic?

Día Mundial del Braille

Mañana, 4 de enero, es el día Mundial del Braille, fecha en la que nació su inventor, el francés Louis Braille.

Braille abrió las puertas de la alfabetización de las personas ciegas y lo hizo cuando era joven, concretamente a los 16 años.

Braille es un alfabeto (no un idioma) que permite escribir letras, símbolos matemáticos, notas musicales, etc. A través de celdas con 6 puntos confinados que componen todas estas posibilidades. Dos columnas de 3 puntos cada una (como si fueran el número 6 de un dado) permiten 64 combinaciones.

Ésta es la base del Braille llamado integral pero desde hace unos 25 años existe el Braille computerizado que contiene 8 puntos por celda y permite realizar combinaciones que se correspondan con los símbolos ASCII.

EL Braille Se lee con los dedos, pero a día de hoy se puede escribir a través de diversos métodos.

Hace dos siglos, cuando se inventó, la única forma era a través de un punzón. Más tarde surgieron varios tipos de máquinas de escribir y hoy existen impresoras Braille que pueden conectarse a los ordenadores.

También existen dispositivos como las llamadas Líneas Braille que, conectadas a móviles, PCS, tabletas, etc. Permiten leer lo que aparece en pantalla. Algunas son muy pequeñas y se pueden llevar a todas partes, (10 caracteres) y otras son mucho mayores y están pensadas para colocarse sobre una mesa (de 80 caracteres).

Mecánicamente, en la línea Braille van apareciendo los textos o informaciones que existen en la pantalla del dispositivo que se esté utilizando. los puntos suben y descienden haciendo aparecer y desaparecer cada línea de texto.

Las dos personas ciegas que trabajan en TOTHOMweb utilizan, además de un programa lector de pantalla que verbaliza, con voz sintética, el que muestra el ordenador, una línea Braille cada uno que les permite leer (y no sólo escuchar) por ejemplo los códigos de programación o los textos de los informes que redactan.

Aunque en algunos casos y países se ha dejado de impulsar el conocimiento del Braille porque muchas personas ciegas utilizan voces sintéticas que leen libros, páginas web, etc. Se ha constatado que ésta no es una buena opción puesto que se anula la percepción lectora de los usuarios y su capacidad de competir, incluso en el mundo laboral, porque, por ejemplo, no tienen conocimientos ortográficos.

Asimismo, la falta de alfabetización Braille también provoca problemas a la hora de aprender nuevos idiomas, estudiar matemáticas, etc.

En este documento, la Asociación Catalana para la Integración del Cec expone por qué Braille y tecnología tienen que coexistir ya que son recursos complementarios y no excluyentes.

Por último, cabe decir que para las personas sordociegas el Braille es la única posibilidad de acceder a la información de muchos dispositivos como los móviles y los ordenadores.